| |

Puebla 2020

Imagen: www.civitatis.com

@herveyrivera

herveyrg@outlook.com

 

El año que comienza en la entidad implica decisiones y definiciones en materia política, de cara a los próximos comicios para renovar cámara de diputados federal y local así como ayuntamientos. La encuesta que se dio a conocer en días pasados (hay que señalar que fue telefónica y no a vivienda) dio al presidente de la república un 72% de aprobación a su mandato son noticias temporales para un proyecto nacional, que como todo proceso de cambio presenta problemas y resistencias. La gran duda en este proyecto que se conoce como “Cuarta Transformación” (4T) la recae en los gobiernos locales y municipales que en muchos casos parecen una réplica de las políticas que provienen de la federación.

¿La “popularidad” que actualmente tiene el presidente es una cualidad –temporal- se puede trasladar a otros actores? A reserva de consultar encuestas que nos aporten datos en ese sentido, ya que en semanas pasadas diversas empresas han colocado al mandatario poblano Luis Miguel Barbosa, en posiciones altas, medianas y bajas; que indican la poca seriedad de esos trabajos; considero que hasta este momento las acciones y resultados del gobierno del estado y municipios del partido gobernante a nivel federal son contradictorios. La curva de aprendizaje, la inexperiencia en la administración pública, los compromisos, las pugnas entre grupos y una inercia del pasado reciente; han impedido a los actores políticos locales que toman las decisiones alinearse al proyecto nacional.

La encrucijada de autoridades locales, municipales y legisladores pasa por las bajas posibilidades para reelegirse, no por la evaluación de los electores sino por la línea que se vislumbra de su líder nacional quien reiteradamente declara que es maderista y que se guía por el principio de “sufragio efectivo, no reelección”; de igual manera y principalmente por la entrega sin demora de resultados de aquellos problemas que importan a los ciudadanos y futuros electores: seguridad, justicia, servicios públicos, empleo, educación, etc.

Es importante también  delinear el papel de importantes actores colectivos en este escenario previo a las elecciones en Puebla, como los empresarios; quienes aún guardan dudas y temores acerca de las decisiones que toma la  clase política local y nacional dela 4T; los medios de comunicación que se han tenido que acoplar a nuevas formas que en ocasiones chocan con las anteriores; la oposición que aun no encuentra la iniciativa para posicionar su discurso con más acción y menos reaccción; las iglesias que en este sexenio tienen una relevancia importante y finalmente las universidades, que en este momento están muy alejadas de quienes toman las decisiones políticas.

En 2020 el proyecto local, que incluye los municipales, tendrá que alinearse al nacional o corre el riesgo de ser un lastre que se define como “cosa que impide actuar con libertad y conseguir lo que se desea”.

Deja un comentario