| |

Las universidades en paro. Radiografía del movimiento estudiantil 2020

¿Cuándo como jóvenes habíamos visto esto? ¿Cuándo como estudiantes habíamos vivido un movimiento estudiantil de estas magnitudes? Siempre escuchamos historias de los jóvenes del 68 o de como los Carolinos expulsaron a los FUA’s de nuestra universidad, pero ¡quién hubiera imaginado que algún día veríamos las insignias de ambas corrientes unidas bajo la misma bandera!

Hoy, Puebla está en vilo, si los estudiantes de la BUAP que son la más grande universidad y máxima casa de estudios del Estado dan miedo cuando salen a tomar las calles, ya se imagina uno los nervios que provocan en las autoridades que también los estudiantes de la UPAEP se sumen a ellos y sin dejar de lado todas las otras universidades que se ha sumado. BUAP y UPAEP, hoy las dos principales protagonistas de este movimiento¿Quién hubiera imaginado de aquellas generaciones que estas universidades, eternos y acérrimos rivales se llegarían a unir como una sola?

Lejos han quedado aquellos tiempos de comunismo no, cristianismo sí y aunque ciertamente persiste hoy más que nunca el conflicto entrechairos y fifís o que incluso “la prole” ha empezado a llegar a universidades como la UPAEP,lo cierto es que los tiempos han cambiado, el México de aquellos movimientos estudiantiles en Puebla de 1961 y 1964 era otro, Puebla era otra y por tanto debemos preguntarnos ¿Qué hicieron bien los jóvenes del 68? ¿Qué hicieron bien loa del 61 y el 64? Y por qué no, ¿Qué hicieron mal?¿Cómo podemos dejar huella para bien en la memoria y vida cotidiana de nuestra entidad y nuestras instituciones? Pero sobre todo ¿Y todo esto por que mataron a unos estudiantes?

Ciertamente hay una agravio y lo entiendo, no hay motivo para desacreditar los hechos, simplemente quiero hacer énfasis acerca de a qué nivel puede llagar la fuerza estudiantil y a qué nivel puede llegar a impactar sobre la opinión pública cuando se lo propone y sobre todo cuando hay un descuido por parte del gobierno, como de sus autoridades.Y es allí donde debemos ponernos a pensar sobre las anteriores cuestiones, ¿Cómo queremos llevar este movimiento? ¿Cuál es su futuro y el futuro que queremos para él? ¿Lo llevaremos acaso como el actual de las prepas de la UNAM en la Ciudad de México? Desmoralizándolo y desacreditándolo como si no importase, ¿Será acaso que termine como el movimiento yo soy 132? Fugaz y con poca efectividad, muy ambiguo a la hora de dejar en claro sus objetivos. ¿Qué pasara cuando el tema de los asesinatos de los estudiantes ya no se hable en los medios de comunicación ni en redes sociales? Porque lo cierto es que a pesar de lo incomodas de estas preguntas es saludable para el estudiantado hacérselas a pesar de las respuestas que primeramente salten de los labios de quienes las oyen. Y es que ya se presentan varios síntomas de desvío de la causa original que detonaron todo esto ya se han dejado ver en diversas partes de la Universidad como de los propios estudiantes fuera de los planteles, por lo que vale la pena traer a la mente los movimientos anteriormente dichos. También se ha reportado menos apoyo en número de gente, no en las marchas, sino en los bastiones de CU y otras facultades que el día 26 de Febrero. Por eso, insisto, tenemos de aprender de los jóvenes del 68 por ejemplo.

Además, y algo que nadie se ha atrevido a decir, ¿Por qué se inició todo esto? Simple, porque la rectoría y autoridades estudiantiles lo convocaron, no por los estudiantes en sí. Que ahora se les haya salido de las manos a los directivos eso es otra cosa. Pero francamente y ya en serio ¿Por qué se inició esto?… por la auditoria que tiene encima la BUAP, ¡así de simple! No hay más y perdón que lo diga, perdóneseme el atrevimiento, pero es verdad y verdad usualmente es incomoda. Y si, muchos hemos oído que eso no importa, que si esto es para “madrear” al gobernador podemos aprovechar y “madrear” al rector también.Claro, yo también estoy de acuerdo con eso. Pero allí es también donde entra mi anterior pregunta: ¿Y todo esto por que mataron a unos estudiantes?, ciertamente que sí y ciertamente que es indignante, pero sinceramente tuvimos que esperar a que se fraguara esto con un movimiento del rector, que con nuestra convicción propia, ya no hablemos de los casos anteriores de estudiantes asesinados, sino el 26 de Febrero mismo, ese día se manifestaron los estudiantes de medicina de BUAP y UPAEP juntos, sí debieron ir de otras facultades, pero en los videos yo no vi ninguno, por lo menos que no llevara bata. En mi facultad, ese día transcurrió con normalidad, hubo clase y muchos ni sabían de la marcha. Cuando debimos de haber sido los primero en salir a tomar las calles, en solidaridad con nuestros compañeros de medicina.

Cuando debimos haber iniciado el paro desde ese día y no por iniciativa de los directivos.

Pero más importante aún, ¿dónde estábamos cuando ocurrió el tarifazo?Sí, es cierto que también hubo una marcha, pero también es cierto que no llegaron a 200 personas (otros dicen que ni a 100 ni 150 personas), ni se presentaron aun con ese mínimo contingente en el famoso “Martes ciudadano”, lo que es peor, la marcha en contra de tal medida ocurrió un día después de ese marte ciudadano. Hubo asambleas, pero fueron mínimas, raquíticas, pocos de los que asistieron a ellas asistieron también a la marcha y los que fueron, terminaron siendo objeto de burlas y memes. Y hoy, muy diferentemente, acuden (o por lo menos ayer) a los planteles y a las marchas en son de protesta. Y eso no solo lo digo por la BUAP, sino por las demás universidades hoy en paro también. Después de todo, todos somos estudiantes y la mayoría de nosotros usamos el transporte público, por lo menos para acercarnos a nuestros planteles. Recordemos que el descuento a estudiantes se lo debemos a la gente de Tehuacán y otras partes de la Mixteca. Hoy, miles de hombres y mujeres poblanos, se tienen que quedar a mirar, como es que un estudiante tiene que pagar solo 6 pesos por su pasaje, siempre y cuando lleven su credencial en la mano y que quizá este a favor de su lucha, pero que sinceramente, hubiera preferido que se levantara antes que se pusiera en pie  contra su gobierno.

Que lo defendiera, pues al final gracias a ciudadanos como él o ella, a través del esfuerzo colectivo hacen posible la existencia de nuestras universidades y por qué no, de becas a través de programas sociales. ¿Dónde quedó ese espíritu combativo de la BUAP que aún no  se ganaba el título de Benemérita y se lo ganó de hecho por acciones como las de 1984? Cuando derrocaron al gobernador Nava Castillo de su puesto, por un problema que tuvo con los lecheros. Cuando eran esos tiempos en que saltaba a la menor provocación o malestar hacia los campesinos, las amas de casa, los niños.Eran asuntos en los que no tenían legalmente que meterse, pero legítimamente si, que no tenían nada que ver, pero que terminaban por tomar parte en ello, por solidaridad y sobre todo por respeto y ese sentimiento de servicio a la sociedad, y de deuda con ella, pues al final, gracias a la sociedad era posible la universidad.

Personalmente, mis respetos a la facultad de medicina, porque históricamente, sencillamente, si participa en un movimiento, no solamente significa que va en serio, sino que es genuinamente puro. Porque, que yo sepa, el su marcha del 26 de Febrero, no se rompió un solo vidrio. Sin embargo, también hay que admitir, que de medicina o no, dejamos pasar por alto muchas oportunidades de cambio y de alzar la voz. Como estudiantes, nos debe avergonzar advertir, que no hemos sido sensibles, ante las demandas de justicia y de dignidad, pero sobre todo de cambio, de otros sectores de la sociedad que no sea el nuestro.

Yo creo que eso es lo principal que debemos aprender de los jóvenes del 68, y de otras generaciones claro está, esa vocación de servicio y de ayuda a la sociedad, en la que a la menor o mayor molestia mejor dicho salgamos como estudiantes a dar la cara por aquellos que son parte de nosotros y para los que estamos preparándonos, para un futuro mejor y brindarles nuestros conocimientos. Y no solo encasillarnos en el tema de la libertad, que ya somos libres, pero no somos los únicos libres aquí.

No desperdiciemos, ni mucho menos usemos mal esa libertad que no tuvieron nuestros padres ni nuestros abuelos. Ni tampoco romanticemos el movimiento actual como los anteriores, si hemos oído como ya dije sobre los jóvenes del 68, sobre los Carolinos, pero ya nos dimos cuenta, hoy más que nunca estar de este lado. De ser ahora los protagonistas, de nada sirve compartir fotos y videos en nuestros perfiles para que todos vean que participamos, se vale sí, pero no en exceso, porque el que es genuino con sus ideales, no le hace falta demostrar que lo es. Seamos genuinos como aquellos a pesar de no gozar de nuestra tecnología lucharon y lograron nuestra autonomía.

Aprendamos pues y dejemos huella en el camino, los estudiantes de las universidades de Puebla nos encontramos ante una oportunidad valiosísima, donde podemos dejar cátedra a aquellos que hoy son nuestros catedráticos y formaron parte de esas generaciones, salgamos a tomar las calles y los planteles como se debe y hagámoslo bien, o incluso mejor, ya fuimos testigos de movimientos fugaces y fallidos y de hecho lo estamos siendo, juntos y como estudiantes, aquellos que mejor que nadie saben de historia incluso podemos, si se quiere, hacer que Miguel Barbosa se convierta en el próximo Antonio Nava Castillo y por qué no, a Alfonso Esparza el próximo Armando Guerra Fernández. Es hora de no tropezar con las mismas piedras que tropezaron otras generaciones.

De cualquier forma, las palabras de Octavio Paz hoy se hacen igual de presentes que en el 68: ¿Por qué? La vergüenza es ira vuelta contra uno mismo, si una nación entera se avergüenza es león que se agazapa para saltar.

Deja un comentario